LA EDUCACIÓN: CLAVE DE TRANSFORMACION SOCIAL

Ramón Alberto Ramírez Dorta*

La educación en su triple finalidad de informar, formar y transformar al ser humano, constituye un importante instrumento de edificación de una nueva cultura, aspiración antigua en la sociedad y en la historia de la educación, asimilada e integrada hoy transversalmente por algunas reformas educativas de avanzadas en todo el mundo.

Entonces tenemos que la educación es la clave para informar a la sociedad sobre los problemas que existen desde una óptica individual hasta la colectiva a través de distintas técnicas; formar en valores éticos que conduzcan a un cambio de actitudes y al desarrollo de aptitudes que ayuden a los ciudadanos a participar de manera activa en la construcción de su futuro y en la salvaguarda del globo terráqueo y; transformar la realidad poniendo en práctica estrategias para la acción que basadas en la cooperación y solidaridad entre los miembros de la comunidad ensayen la solución de los problemas que afectan a la humanidad en general.

En Venezuela el derecho a la educación está consagrada en la Carta Magna en su artículo 102 el cual reza lo siguiente: “La educación es un derecho humano y un deber social fundamental, es democrática, gratuita y obligatoria. El Estado la asumirá como función indeclinable y de máximo interés en todos sus niveles y modalidades, y como instrumento del conocimiento científico, humanístico y tecnológico al servicio de la sociedad….”

De lo anteriormente expuesto se infiere que la educación venezolana se orientan hacia el humanismo, enfoque que encauza su atención al desarrollo del ser humano como actor epistemológico y dinámico que propugna el conocer y el hacer, puesto que acentúa su práctica en la colectividad con sentido de solidaridad humana; y procurar que esos ciudadanos sean críticos y activos en la búsqueda de darle un sentido a la realidad social, política y económica que viven, que todos y cada uno tenga capacidad de emprender actividades productivas que satisfagan sus necesidades y logren los propósitos del bienestar común.

En síntesis, podemos decir que la educación en Venezuela es el pilar fundamental de la convivencia y que debe ser utilizada no sólo para la transmisión de conocimientos sino también para formar y transformar una persona con una dimensión ética, ambientalista, filosófica, social y jurídica y así tener una mejor sociedad donde convivir.

*Estudiante de la Especialidad en Docencia Universitaria (UNERG, Venezuela)